Hagamos un pesebre vivo y palpitante

Preparémonos para recibir al “Rey del Amor”

Busquemos el portal adecuado, pequeñito y acogedor…

“Como nuestro corazón”. y comencemos a armar el pesebre

con todo amor y pensando en  Nuestro Salvador.

- A la entrada del portal, una estrella bien visible, la que guiará nuestros pasos para no salirnos del camino del amor…

- El gallo, que con su canto alegre, cada amanecer nos recordará que debemos saludar al sol que Dios nos regala anunciando un buen día…

- En el centro del portal: una fajina de paja, como símbolo de nuestra hospitalidad y bienvenida; que servirá de cuna y cobijo;donde descansará el AMOR, por eso debe ser tibio, como un nido que el ave prepara para sus polluelos, y suave como las manos de un ángel…

- El asno fiel, que nos recordará siempre la mansedumbre, el espíritu de dación y de sacrificio en aras del amor…

- La vaca ofreciéndose toda entera: leche, carne, piel, astas y pezuñas, como ofrenda de amor a la humanidad entera, y para el Niño, su tibio aliento como manta…

- La oveja, símbolo de humildad y serenidad, para recordarnos que en la suavidad y la dulzura se encuentra la paz…

- El Ángel custodio que representa nuestra conciencia, y que debe estar alerta siempre para evitar el mal…

- San José y María, símbolos de fidelidad, entrega y sencillez, ofreciendo con toda humildad, al Rey del AMOR, para el perdón

de los pecados del mundo entero…

- Y al final, con la mayor reverencia y aceptación total, ubicar en ese nido de paja, al AMOR,“ JESÚS ES EL AMOR…”

El pesebre está terminado y ahora late en tu pecho…

da Gracias al Señor porque llegó Navidad!!