No todo se lo traga la tierra

Mi Cuerpo es una Cárcel
Que aprisiona a mi Alma.
El día que la tierra se lo trague
De él quedará mi Alma liberada.
Yo sé que tengo un Cuerpo.
Mas sé, también, que no soy solamente
Este Cuerpo que tengo.
Un Cuerpo tengo, pero soy un Alma.
Por eso, cuando muera,
No moriré del todo.
No seré sólo un Muerto
Del que ya huyó su Alma.
No seré sólo el Polvo
Que salió de La Tierra
Y La Tierra se traga.
Seré, también, el Alma Enamorada
Que salida de Dios, a Dios se vuelve.
Como se vuelve al Mar la gota de agua,
Tras tanto tiempo de sentirle ausente.
Abridme las entrañas.
Mirad en mi cerebro.
Partidme el Corazón y analizarlo.
Veréis que en él tan solo veréis Carne
Y os juro que de Amor lo tengo lleno.
Tanto que por sus poros se me sale
Cual surtidor que salta hasta los Cielos
Para ser sólo Amor. ¡Amor sin Carne!
Y ese Amor es mi Alma
Rompiendo las cadenas de mi Cuerpo
Que hasta que no me muera la atenazan.