Tu sabor

Tu sabor
de firme, delicada y necesaria
de mantequilla, fresa y pan tostado
recién aroma de la mañana
de la brisa que inunda tu pelo
con toques de almohada
de tu ser perfecto
sonriente, sensual, cadencioso
y yo con mi vicio como compañero
ocultando mi rostro entre bocanadas
dirigido entre apestados ceniceros
a los que acudo con movimientos toscos
un simple café será suficiente
para adular la química
que forma mi otra mitad.
Dos sabores etéreos que se funden en marmita
y convierten en brebaje de amor
haciendo caer en la tentativa
de unos buenos días más
como diestros engranajes empezamos la jornada
Tu salvando al mundo impertérrita
en horario determinado avistando dioses
y salvaciones de hasta seres inanimados
Yo queriendo sobrevivir,
terco con el embrujo que recibí
cuando juntamos nuestras manos
y paseamos entre oscuras calles
como ocultando mi debilidad
y que tú en silencio has llevado
como justicia para el justo.
Salvaste a un ser animado
y aun queriendo ahora ser dios
agradezco el sabor de la mañana.