He vaciado mis ojos
como dos cristales rotos.
Van dos ríos que se juntan
en un mismo pozo.
Húmedos los valles viven
con un brillo celestial
que transforma la escena
en un pasado lugar.
Escondite pasajero
de toda tempestad,
busco a tientas,
no lo encuentro,
necesito su amistad.
Suave brisa mañanera
que me permite volar…
despega mi mente,
se elevan mis sueños
y logro viajar.
Cierro mis ojos profundos,
y se extiende a mis pies
un universo nuevo
que me olvida de todo,
me crea otra vez.
Y renovada, abro esas ventanas
que al azul se presentan,
uniendo los cristales
que mis ojos quebraran
y que en mi vida se encuentran.