Es la tarde y estoy triste,
escucho una melodía, pienso en ti.
La música que se repite
la cabeza que me duele,
tu imagen me es lejana
y la tarde me envuelve.
Comienza la primavera,
el sol que brilla en la acera,
la vista se nubla,
por mi mejilla una lágrima suelta.
Me siento como mareada
y en sueños pretendo verte,
en vano es mi sacrificio
¡No puedo tenerte!
Recuerdo el pasado,
un sábado de primavera,
un lago, una arboleda,
tu, que cruzas la carretera.
Veo tus ojos entre nieblas
las lágrimas se me caen,
un saludo, una sonrisa,
yo contesto... No apareces.
Pasas a mi lado, me miras...
(vuelvo a recordar)
un banco, una palabra,
en una fotografía,
junto a mi, estas.
De pronto... tu voz me llama,
vuelvo a la realidad.
La desilusión llena mi alma,
no eras tu,
¡¡ No era verdad !!