Nunca pude ser poeta.
Dios lo sabe y yo lo sé,
pues por más que lo intenté,
sólo tuve la careta.
Quise serlo, sí, lo ansié
desde el Alfa hasta la Zeta;
pero sólo fui maceta
que sin flores me quedé.
Si alguien tiene una escopeta,
que me apunte al corazón
y destroce la ilusión
de este iluso de probeta.
He cavado mi cuneta
para que sin compasión,
alguien deme el empujón
sin que en un cajón me meta.
Y después, con cal de Creta,
sin dejar de mí ni un rastro,
cubran a este poetastro
que quería ser poeta.
Heriberto Bravo Bravo SS.CC
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!