Escuchando un día la radio,
después de tanto tiempo que pasó,
volvieron a tocar aquella melodia,
con la cual tú y yo solíamos
hacer de nuestras tardes,
un cantarle al amor.
Escuchando aquella melodía,
me sentí envuelto en tu aroma,
en tus brazos, volví a sentir
todo tu calor, con aquella melodía,
de nuestras tardes de amor.
Podrán haber pasado los años,
pero cada vez que la escuche,
recordaré cuánto te amé y lo
mucho que me quisiste vos
al son de esa melodía de
nuestras tardes de amor.
Lara Elra Cira