Juventud extraviada

Esta mañana, como siempre me encontraba
fijando mi mirada hacia el horizonte
y de pronto sentì, que yo necesitaba,
alguien con quien hablar, y alguien a quien contarle
de todas las aventuras de mi juventud pasada.
Volvieron hasta mì, bellisimos recuerdos
de mis años bonitos, la edad de la inocencia
cuando tu eres felìz, cuando cualquier tropiezo
lo superas tan simple, con cariño y paciencia.
Cuando no te atormentas, con problemas pequeños,
cuando crees que tu tienes, al mundo entre tus manos
cuando tu vida misma la vives como un sueño,
cuando crees que en el mundo se vive sin engaños.
¡Què bonita esa edad!, ojalà que volviera
para tomar de ella, todo lo positivo
y combinarlo asì con toda la experiencia,
y alcanzarme las metas que yo siempre he querido.
Pero la edad que duele, no es la ya pasada
me duele la edad de ahora, porque siento que me falta
intentar ser feliz, sin remontarme a nada
y aceptar que en la vida, se pierde y se gana.
Y tengo que dar las gracias, por la vida que tengo
aunque a veces yo sufra, porque siento que me falta
la magia de un cariño, la ternura y el aliento,
pues yo siento que la vida es un eterno sube y baja.
Autora:
Remedios Gila Galicia Juàrez