Para sandra y rocio

Me marcho a tierras lejanas sin rumbo fijo y “sine díe”. Me arrastra la inquietud de quedar cerca del sepulcro de ese discípulo de Cristo que también sufrió la cruz. Echaré mucho de menos ese café o ese té que me tomo tan a gusto cerca ya, el atardecer. Las gracias os doy “ mis niñas “. “Mis niñas” Sandra y Rocío. Que con tanto agrado me tratan. Y que por ello, me siento muy agradecido. Cuando esté por esas tierras Cuando esté por esos mundos No sé si con alegría o con tristezas No sé si con calor o con frío No sé si cansado o con firmeza No sé si con…..¡Bueno qué más dá! Si sea cual sea mi estado, a este Jerez de mi alma, lo tendré que recordar. Me acordaré de mi gente Me acordaré de ese bar. Me acordaré de “ esas mis dos niñas” a las que no hay quienes, en agrado y simpatía, en todo el mundo las puedan ni tan siquiera igualar.
P.D.
Aunque el día bién no vaya,
siempre para mí tenéis
la sonrisa fresca y franca
por la que me haceis sentir
tan bién como en mi propia casa.