El reloj de la U.C.I.

El reloj de la unidad de cuidados intensivos
De pronto no excite el calendario,
la vida cotidiana se ha parado.
Solo el frío reloj de la U.C.I.
el ritmo de mi vida va marcando.
Su tictac es una cansina letanía
con acento de bolero trasnochado.
A su ritmo susurro yo tu nombre
llena de esperanza, entre llantos.
Me negué a mirar al cielo,
solo a nuestro amor fui implorando.
Ese frío reloj fue mi compañero
en aquel camino tan amargo.
Su tictac se pierde en el recuerdo,
va la vida su ritmo recobrando.
Un gran manto de tisú y luna llena
cubrirá su recuerdo en el pasado