Si Dios nos ha enviado un ángel de amor, pues yo lo bendigo porque nos cuida de todo mal y nos da mucho más amor para los dos.
Aunque fuera sólo para días especiales, quisiera que Dios me diera la gracia de poseerlo todo, para entregarte todo el amor que existe sobre el universo entero. Te daría también mi ángel, todos los tesoros que hay en este mundo; te daría todas mis ilusiones que serían como piedras maravillosas encontradas en una gruta de ensueños, piedras hermosas cuyos destellos guardarás con celo en el cofre de tu corazón...
¡Oh amado mío!, yo haría que en este día, todos los caminos florecieran a nuestros pies, y tendría a tus pasos las ofrendas de mi alma, llenas de polvo de mis ilusiones, y mi espíritu como pájaro azul, cantaría para ti en este día con sus más dulces trinos, las más hermosas canciones de amor...
He recibido la semilla del amor que en ti quiero sembrar, déjalo brotar en una florecilla y sus frutos podremos cosechar, porque con tu cariño me das alegría y con tu mirada alimentas mi vivir, porque con tus labios dices poesías, porque el verdadero amor en ti puedo y pude descubrir.
Quisiera llevarte a mi cama de sueños, ilusiones, temores, miedos, preocupaciones y anhelos, porque en ti los quiero compartir. Tú eres mi desvelo en las noches, mi insomnio, tú eres mi primer amor realmente, después de todo y de ti no lo puedo negar ni callar, doy muchas gracias de haberte encontrado. Te amo, te amé y te amaré por siempre.
¿Por qué tarde tanto en encontrarte?
¿Donde estas que ya no escribes? ¡ dinos que ha sido de ti!, es quizas que no pecibes el vacio que hay aqui.