Yo creo adivinar…
que más allá del olvido
hay un lugar donde los sueños guardar.
Y es en ese acolchado y rojo rincón
que es mi corazón,
donde tengo al amor, e intacta la ilusión.
Por que la esperanza es lo único que me da fe y confianza
y calma mi desdicha y mi añoranza.
Por que estar a solas
no es estar sola. yo siento que tengo el pecho
lleno de perfumadas amapolas,
y que un mar me baña
con sus suaves olas.
La vida no es absurda
absurda es la mentira,
y las cosas groseras y burdas
que se dicen sin pensar,
y solo por dañar.
Cuando dejamos de lado
a quien sin motivo
nos ha maltratado,
todo ha de cambiar
y una dicha nueva ha de comenzar.
¡déjame empezarte y alucinarte!
te daré a ti solo mi mejor parte.
Y si no quieres ¡vete!
¡nada te compromete!
En ese espacio lejano y alado,
vive un sueño atormentado.
Cuando el amor se ha marchado, es difícil sobrellevar sin llorar
ese insoluble dolor, donde todo se apaga y queda sin color.
¿te imaginas un mundo en blanco y negro?
yo me espanto… ¡no me alegro!
Solo sobrevive inquieta la nostalgia,
y no logra ver la luz,
solo se siente sobre las espaldas una pesada y dolorosa cruz.
Yo creo adivinar…
que es en vano volver
junto a quien hace mucho
dejó de querer.
Es de hombre olvidar hasta su nombre,
y dejar que otro amor la cuide y la asombre.
Pero ha de llegar el día,
en que el sol te deslumbre,
pero no hallarás
quien te ame como yo,
y quien te alumbre,
Y dirá tu alma…
y gritará tu corazón.
¿sabes mujer?
al quedarme sin ti…
¡me quedé sin mi!
MARÍA OFELIA REIMUNDO
11/4/2011
ARGENTINA