la joven india

Una noche fría de invierno
Caminando por los solitarios cerros Una joven india a su hijo cargaba
Para llevarlo hasta el lejano pueblo Sus ásperos pies descubiertos
Con callos y mugre repletos
Pobre india casi corría
Por la prisa que tenía El viento frió soplaba
Su oscura piel descubierta quemaba
Pareciera le no importar
A su enfermo hijo llevaba a curar Su rebozo sucio, al niño cubría
Con un fuerte abrazo ella lo sostenía
Iba amaneciendo casi era de día
Cuando al fin el pueblo cerca se veía. Diviso a lo lejos la casa que buscaba A veces entre las piedras, ella tropezaba
Su hijo gemía, inquieto lloraba
Y ella entonces se desesperaba Por fin llego al pueblo Al buen doctor fue a buscar No traía dinero
Solo traía un santo
Para al cual rezar Tocó a una enorme puerta de madera
Con tal fuerza pa ‘que la escucharan
Solo había silencio nadie contestaba
Ella solo lloraba y rezaba.
Una luz se encendió entonces
La esperanza a ella volvió
Veía una sombra, escuchaba voces La enorme puerta el doctor abrió Y al escuchar al chiquillo llorar De inmediato al niño atendió.
No tengas miedo le dijo el doctor
Que tu hijo vive, se pondrá mejor
Tu esfuerzo de traerlo, no ha sido en vano
Pues tu hijo es fuerte y crecerá sano.
La india lo miro agradecida
Le tomo la mano y le dio el santo
El doctor entonces le dijo:
__Toma este abrigo para que te cubras Límpiate esas lágrimas ya no tengas dudas. Ella se dio la vuelta con su hijo en brazos
Iba ya tranquila secándose el llanto
Se volvió al cerro para su choza
Su hijo estaba bien, se sentía dichosa Solo un sentimiento hace actuar así
Es amor de madre ¿Qué más se puede decir?