De verdad que el Señor nos dá sabiduría
y nos manda señales que poder descifrar,
que locura la mía,enredando mi vida
con seres que no saben entender mi penar.
El me quiso engañar, hacer que yo pensara
que sacrificio haría por estar junto a mí,
que su vida pasada, el abandonaría
y que todo dejaba por venirme a adorar.
Pero una amiga vino a despertar mi sueño,
a mostararme que todo el lograba inventar,
que tenía de esta historia,con otras recorrida,
y que solo trataba de ventajas sacar.
Que miserables seres que siempre se aprovechan
de las pobres mujeres que viven soledad.