Mientras el agua del arroyo cae,
tan suave y tan cristalina,
el ruido de sus cascadas,
hacen que ame más a la vida.
Y me siento como nunca,
más relajada, más sana,
y el trino de los pájaros,
me hacen despertar a la mañana.
Me siento pura como una virgen,
amada como una madre,
me siento el pico de una montaña,
y el silencio de la tarde.
Soy hierba y soy rocío,
soy pétalo de una rosa,
caminito de las sierras
o una simple hoja.
Me siento naturaleza,
me siento llena de vida,
soy brisa de las sierras,
y del camino piedra molida.