Todos somos todo

Enojarse por algo intrascendente, es volver en contra a la verdad
Es tratar de no saber, es maltratarse, las tierras, los mares, las gentes, las ideas, la belleza, son de aquellos que saben verla sentirla y de inmediato consiguen aquello que los representa desde sus adentros hacia afuera, nada es de nadie y todo es de todos, en un mundo temporal las cosas carecen de sustancia almica, en un mundo espiritual, todo se llena de la magnificencia de la divinidad que a partir de reconocerla yace en el interior de cada ser, nuestro hipotálamo se llena de paz, cuando atraemos paz, de lo contrario, cuando no la deseamos, seguiremos en la rueda de errores e ingratitudes, es bueno darse el lujo alguna vez de sentirse bien con quien una/o es y con lo que tiene. María Verónica García