Esta es nuestra obra, sin muros, sin fronteras, donde somos, los constructores, de este enorme edificio, llamado amor!!. Lo vamos construyendo, día a día, con la palabra, la acción, con caricias, besos, y comprensión. Todo está en manos del Maestro, verdadero constructor, y nosotros, sus obreros, para seguir trabajando, este amor. Construyamos el amor, siempre presente, nunca ausente, ni siquiera una fisura, tampoco una palabra dura. Contruyamos! sigamos contruyendo, sin descanso, ni vencerse jamás!! y veremos, que esta obra, no se termina jamás!.- OSIFAZ - Valdivia - Chile.- 21 -Agosto- 2009.-