Cuando llegamos a casa veo que,
te vas de mi lado mientras en,
pocos segundos siento tu voz tenue,
llamándome cuando acudo a la,
habitación donde estás tú tendida,
sobre nuestra cama, no sé qué decir,
al verte sobre la cama, ni cómo tocarte.
Mis ojos quedan perplejos y
fijos mirándote que te muestras,
ante mi desnuda, mis ojos quedan
fijos admirando tanta belleza y
jamás soñada por mi corazón,
que comienza a acelerarse de deseo.
mis ojos no dejan de recrear su,
vista que no dejan de subir y
bajar contemplando tu hermoso,
cuerpo desnudo, cuando llegan hasta,
tu boca y no dejan de fijarse en,
tus sensuales labios rojos que,
no dejan de llamarme a tu lado.
Me reclino sobre tu cuerpo ardiente,
fogoso, muy excitado mientras mis,
labios buscan ansiosos tus excitantes,
senos redondeados muy duros y
erectos, mis labios se van directos,
a tus pezones erectos de areolas
grandes con un bello color marrón,
de donde destacan tus deliciosos
pezones que se erectan desde el
centro de tus bellas areolas,
embelleciendo tan maravillosa y
seductora sensualidad.
En silencio succiono tan deliciosos,
manjares y el silencio se vuelve mi,
aliado mientras de tu boca comienzan,
a oírse dulces gemidos entrecortados,
como a tu respiración la ocurre igual,
ahora no sé si quiero abrazarte o,
solamente quisiera extraviarme por,
tu hermoso cuerpo desnudo,
pensar en los hermosos recuerdos,
fugaces que hemos tenido juntos o
mejor aun hacerte el amor.