Revolotean de flor en flor
cargadas sus alas de multicolores arabescos.
¡Qué preciosidad!
Tengo el privilegio de poder atisbarlas,
en su suntuosa travesía
entre flores y colores;
labrando rondas imaginarias
acompasadas de celestiales melodías.
Como estrellas, se entrelazan para danzar,
absorbiendo el aroma de dorado cristal.
¡Oh mariposas!
De efímera vida, pero belleza perenne,
envuelven la vida, alegran las pupilas traviesas
haciendo viajar la imaginación por el infinito,
llenando espacios oscuros y adornando el verdor.
Con su gallardía y atributos de recónditos caminos
se entrecruzan en su danza
trepando y deslizándose
entre la esmeralda de las hojas
y la tenue brisa soñadora.
Que de tanto rozarlas,
envuelven su andar con sonido de sedas,
filtrando nostalgias en mi alma silenciosa,
extasiada en la contemplación
de tan bello esplendor… Mecha Foderé
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!