No te preocupes, yo estaré aquí.
No importa el sol quemante,
no importa la lluvia vacilante.
Miraré como pasa la vida en un instante,
plasmaré con palabras la amargura de esperarte,
calmaré la desesperación de no mirarte,
pues culminaras mis angustias al verte llegar.
Que importa la media hora de invierno de ayer.
Que importa la hora de verano de hoy.
No importan, si sé que vendrás, que me mirarás,
me besarás y conmigo te quedarás.
Olvida ya el camino recorrido, el cansancio de tus pies,
la llovizna de tus ojos, el quebranto de tu piel.
Olvida todo y sigue tu destino,
adonde estoy yo, con mi pluma y mi papel.
Olvida como yo te extraño,
no importándome tus momentos de ausencia de ayer,
o la hora en la que te espero hoy.
Qué más me da esperarte una tarde más.
Qué más me da esperarte un día más.
Si ya te esperé toda mi vida....