Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Poesía
Todos
Ordenar por:
Mas recientes
Menos reciente
Más vistas
Defecto
Poema
La Poesia que ha intentado acceder no ha sido encontrada en nuestra base de datos, a continuación le mostramos una poesia aleatoria.
Categoría: Personales

CaLoR

Era una tarde en la que hacía calor, las gotas de sudor resbalaban por mi frente. Me dirigí a la ducha, quería refrescarme de tan sofocante día.
Abro el grifo y empieza a caer el agua sobre mi cuerpo, a resbalar por entre mis manos, entre mis piernas, entre los muslos. Mojando cada rincón de mi cuerpo, levanto la cabeza, el agua me cae en la cara, mis labios se abren para dejar que el agua llene mi boca, cierro los labios y el agua se derrama resbalando por mi cuello.
El calor es sofocante y el agua no ayuda.
Tomo entre mis manos el grifo de la ducha, lo paseo por todo mi cuerpo, empiezo por la espalda haciendo que el agua caiga hasta donde aquella termina su buen nombre, resbala por las piernas para dejarse caer en el suelo de la ducha.
Ahora la dirijo hacia la parte delantera de mi anatomía, por el cuello, bajando por los senos haciendo que mis pezones se tornes duros al contacto de mis manos mojadas. El calor no se sofoca, va a mas…
Sigo bajando, entreabro las piernas, el agua fluye acariciando el interior de mis muslos.
Bajo las manos, y mi excitación va aumentando, hace calor. Miro hacia la puerta y estás allí, quieto, absorto, mirándome sin decir nada. Cierro el grifo, y salgo de la ducha.
Quiero coger una toalla, pero tú me lo impides, me la quitas de las manos, arrancándola con pasión. Me miras de frente, me das la vuelta y me coges por detrás. Me aprietas fuertemente contra ti. Puedo notar tu excitación, tu respiración es agitada, al igual que la mía.
Desabrochas tu pantalón dejando ver lo que antes solo imaginaba. Comienzas a besarme, me besas con pasión, lames cada rincón de mi cuerpo, besas mi cuello bajando por mis brazos, acaricias mis senos desnudos, yo te respondo a la excitación acariciando tu sexo.
Tus manos se vuelven lascivas, coges una de mis piernas y la levantas, dejando al descubierto el objeto de tu deseo. Y una mano juguetona se desliza hasta allí, haciéndome suplicarte.
Me pones contra la pared, no me dejas opción a nada. Quieres penetrar dentro de mi, aprietas tu sexo contra mí y en un forcejeo consigues hacerlo. El placer ahoga el dolor.
Me penetras, tu mano sigue juguetona, acariciándome, haciendo subir mi excitación cada vez mas y mas.
Te separas de mí, me pones de cara a ti, me besas de nuevo, con lujuria, nunca me habías besado así, pero me gusta.
Me coges de la mano, te diriges hacia la cocina. Allí me miras, vuelvo a notar en tus ojos la pasión que encierras. Me agarras por la cintura y me subes a la encimera. Abres mis piernas y metes tu cabeza entre ellas. Tu lengua me hace suplicarte, pones mis piernas sobre tus hombros, me agarras de las caderas, aún no puedo creerlo.
Tu lengua se desliza por mi sexo, tu boca abre un mar de placeres antes desconocidos, tu lujuria es incontrolable.
Quiero besarte, te suplico. Vuelves a mirarme, tus ojos, tu mirada lo dice todo. Me besas, te beso, nos fundimos en un abrazo infinito, los cuerpos se mezclan fundiéndose en perfecta armonía.
Quiero poseerte, consigues decirme. Ahora soy yo la que te mira con lujuria. Tomo entre mis manos tu sexo, quiero besarlo, dirijo mis labios hacia él. Mi lengua se adelanta a mis labios. Despacio, acompañando mis manos introduzco tu sexo en mi boca. Mis labios lo hacen todo, la lengua ayuda a que tu excitación vaya en aumento. Mientras, mis manos no se quedan quietas y siguen acariciándote por el interior de tus muslos.
Me coges la cara…. Ven, me dices, ahora soy yo el que quiere besarte.
De nuevo nos fundimos en un abrazo, te arranco la camisa que aún llevas puesta, dejando tu torso al descubierto. Acaricio tu pecho, vuelvo a besarte, ha llegado el momento que tanto ansiamos.
Con cuidado, te suplico. Me miras de frente, a los ojos. Tu sexo busca el mío, me penetras. El placer va aumentando. Mis piernas se entrelazan por tu espalda, apoyadas en tus caderas. Poco a poco el ritmo va aumentando, cada vez la penetración es mayor.
El ritmo aumenta, acompasado por nuestros gemidos, más y más, cada vez más rápido, cada vez más dentro, no puedo más, te susurro. El placer empieza a subir, y sube y sube hasta llegar a lo más alto deteniéndose el tiempo por unos segundos, puedo sentirte tan dentro de mi, puedo sentir tu placer, al igual que tú puedes sentir el mío.
Solo se oyen nuestras respiraciones agitadas. Me besas, te beso.
Agotados, te abrazo, me gusta oír el sonido de tu corazón aún agitado.
Besas mi frente. No hay palabras, aún no.
Sello tu silencio con mis labios.
Solo espero que mañana vuelvas, te esperaré.
E.M.C. 10/03/2006
Datos del Poema
  • Código: 262053
  • Fecha: 10 de Marzo de 2006
  • Categoría: Personales
  • Media: 6.81
  • Votos: 141
  • Envios: 10
  • Lecturas: 2,426
  • Valoración:
Datos del Autor
Nombre: emc24
País: EspañaSexo: Femenino
Fecha de alta: 22 de Septiembre de 2005
Ver todas sus poesías
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 3.149.26.176

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Poesias: 99,627
»Autores Activos: 4,260
»Total Comentarios: 47,522
»Total Votos: 9,266,099
»Total Envios 159,596
»Total Lecturas 142,892,756

© HGM Network S.L. || Términos y Condiciones || Protección de datos | Política de Cookies