Al Fenix de los igenios

Que gran cuna donde naciste. Brillo al nacer darias a la luna, por tu ingenio que no cupo en este mundo. Si el tiempo todo lo apura y lo sabe, que habías de ser grande el mismo tiempo lo sabía. No hubo mas altura que tu frente, hinchada de versos y de poesía y si existe el Parnaso, ya las musas, adorandote han de estar eternamente. Oh, Fenix, miedo me da enojarte por mi burda escritura, que no persigue sino alabarte aunque de alabanzas tengas mil insignias y la pobre mía, falta de rima, ha de morir como tantas otras. Obras de grandeza son tus obras, que nadie alcanzará ni en España ni en América, pues para escribir con tal destreza, hubo de girar y girar la tierra, hasta que nació un monstruo de la naturaleza llamado Lope de Vega. Mas facil fuera que el mismo renaciera.