Sin palabras.

¿Cómo comenzar a escribir las cosas que no se dicen ni se callen?, es distraido el amor en su soberbia complacencia, te miro y pienso cosas que no puedo escribirte
¿Por qué me pasará esto de repente?. Mi deseo no tiene palabras sólo caricias, refugios celestes, y en mi universo tú eres la única estrella.
Vamos a jugar con la lengua en la garganta, quiero encontrar las palabras en tu cueva magica, tal vez si me tocas un poco más duro podré nombrarlas.
Acariciame los ojos quiero llevar a mis pensamientos tus labios y asfixiarlos con un beso de suavidad retardada.
Nombremos al deseo, chocolate, cuerpo mojado, piel morena, dedos largos, ¿Te parece correcto?. Llámeme con tus ojos, observame con tu boca.
¿Cuántas palabras de pasión y deseo pueden decirse y no decir nada?. En mí la llama vive encendida, sofócala con tu cuerpo, amarrala con tu carne, penétrala, mojala con tu sangre, mi deseo lleva sólo tu nombre, tu corto y fino nombre.