Mi voz, flotando en tu oido
Tu boca, a la mía robando
Besos tan atrevidos, que ruborizan mis labios
Manos de zumo y racimo
Sobre mi cuerpo esperando
Baja presuroso, de la lengua del Dios, que te ha sentido y creado
Tráeme tu amor prohibido
Apriétame con tu llanto
En forma de alondra sobre tus alas!. tiñeme, de azul y blanco
Emerges de mi sigilo.
Humedeciendo al rocío, con tus gotas, ardor del ocaso
Te siento trepídar, en la luz que honda en mi ombligo
Como un hilo de Amor a mi alma surcando!.
Deseo de libertad!.
Solo pensarte en mis sueños y un haz de nueva luna
A mi almohada, con tu imagen habrá bañado!.
María verónica García