Llegaste a mi vida en primavera
cuando las flores eran más hermosas,
me colmaste de amores y de mimos,
como la más perfumada de las rosas.
Me sentí estremecer entre tus brazos,
me palpabas como a pétalos de flor,
mi corazón vibró, sentí tu abrazo,
con la llama encendida del amor.
Quiero llenar tu corazón de flores
quiero colmarte de besos y de amor,
quiero sembrar en la arena los rosales
y en los caminos encontrar el perfume de la flor.
Los almendros florecieron nuevamente,
y engalanan con sus flores los caminos,
revolotean las alegres y vistosas mariposas,
y nos marcan el sendero del destino.
Y si el mar se llenara de perlas y corales,
y los peces de colores se pusieran a bailar,
y las olas cantaran melodías
qué alegre sería por la playa caminar.
Que la luna se refleje en los estanques,
y que alumbre con tu tenue resplandor,
las estrellas acompañen en las noches
y salpiquen con su magia, nuestro cielo de color.
Chelo Álvarez
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21 de febrero de 2011