La cuarta dimensión

El descubrimiento
Siempre se dice y se habla de la tercera dimensión
Supuestamente porque no conocemos bien la cuarta,
Que a saber, no existe, esta es una humilde opinión
Porque creo estar viviendo en la cuarta dimensión
eso me hace creer que existe y todos la conocemos.
Creo haber descubierto esa cuarta dimensión, claro,
la duda me asalta, pues comprobado científicamente
no lo está todavía y quizá nunca se demuestre el lugar
En que se encuentra esa dimensión, por desconocida,
Empero quiero expresar mi sentir al respecto y decirles
Que ya muchos hemos atravesado esa dimensión y la
Hemos prácticamente palpado, se siente y mucho,
Luego, ¡existe!
Y es que es tan intangible y al mismo tiempo
se siente tanto, sabes que estás ahí en cuerpo y alma
que lo vives, que eres solamente tú en el momento,
tiene mil nombres el sentido que aquí escribo y
Que ustedes me dirán si acierto o sólo desatino,
Mi apreciación de esa dimensión la he sentido poco
Pero es muy distintiva de las otras tres dimensiones
es que esta se da y se siente cuando un ser tangible
y amado se nos va, se adelanta en el camino, muere.
Y hablando de lo terrenal, a que tanto se aferra la vida
el alma se eleva al cielo, el espíritu se dice se va al reino
de lo intangible y lo por nosotros tan desconocido; ésos
son los muertos. ¿Y a dónde vamos los que estamos vivos?
otros hechos nos hacen sentirla cuando en vida, un amor muere,
y se le llama desolación, mas recordando cómo uno se siente,
cree haber traspasado en vida a los umbrales de la muerte y así
se siente también con la traición de los amigos muy queridos.
En quien depositas lo mejor de tus sentidos y a la pérdida
que esto conlleva, le llamamos desilusión o desaliento,
y nada peor que ese momento en que sientes que la fe
la has perdido, que te han herido de muerte y se llevaron
consigo, como los más viles ladrones, tus sentimientos.
Entonces, te sientas a descansar, a pensar, a meditar en
El acontecimiento y piensas que estás perdiendo la razón
Esta es la cuarta dimensión, el cuerpo parece salirse de sí,
Crecer, agigantarse, empequeñecer, disminuirse, irse...
¿A dónde se va en este momento de reflexión lo material
que parece inexistente? y lo espiritual junto con la razón
se envuelven, se enredan en una terrible batalla, casi
se podría decir que entran en guerra y pasan sin saber
a lo carnal a la cuarta dimensión, la transportan, la trasladan
Eso es lo que yo creo al estar, personalmente y sola,
pasando en estos momentos, por una dimensión que nos
parece desconocida y que tantos en alguna ocasión
la hemos vivido, la hemos sentido... luego... ¡existe!
Ahí es dónde nos colocan y se rompen las tres
Dimensiones hasta hoy muy conocidas, es al ser
las dimensiones extrañamente cambiadas por amor
Pero por el amor herido, al momento de sanar las heridas.
La soledad nos parece desigual, a unos les agrada y a otros los
Hace trizas, la desolación resquebraja todo sentimiento y
Ocasiona que la carne de tres dimensiones se expanda o se achique
Convierte al corazón, motor indispensable para seguir adelante
En un músculo que a pesar de resistir, cambia de tamaño,
Pierde su propia dimensión, y siendo motor del cuerpo,
Lo afecta a todo, todo, venas músculos y a la misma razón
Creo que al descubrir esta cuarta dimensión que así nos martiriza
Es preferible siempre conservar la perspectiva y tener sólo
La materia inamovible y retener lo espiritual pegado a la razón,
Convencer al corazón de que retorne a la dimensión conocida
Y a que quien conoce a esa cuarta dimensión referida
Sabe que es comparable con los nombres de los más
tristes sentimientos que tenemos y que en dicha ocasión
Ni ellos nos acompañan, entramos solos y ahí quedamos
Lara Elra Cira