La mujer intocablemente bella

Voy a rendir a tus pies mi vida
mi alma y mi corazón
para que sea hoy y siempre la dicha
de ver en tu vida, esa enorme misión
Dios hizo de mí tu belleza
y puso en mis manos, otra enorme misión
la de cuidarte, servirte y amarte
como una diosa de mi corazón
Cómo amiga antes de madre vamos hacer del amor la ilusión
para que unidos un día
a Dios prometamos, por siempre la unión
Voy hacer de mi vida otro cielo
donde tu siempre te sientas mejor
y no sientas aquel brusco cambio
donde Dios mío, té hacia sentirte mejor
Aquí en la tierra, te voy a servir
porque como hombre, me voy a morir
porque jamás mis manos vas a sentir
donde la ira, te pueda herir
Dios me mando en ti una mujer
para reproducirnos y hacernos crecer
y hacer de tu alma, una bella ilusión
a la cual Dios llame: