Se presenta en mi noche de tristeza,
y me arranca una sonrisa. Cierro
los ojos, igual veo bajar del cerro,
levanta mis parpados con delicadeza.
Se aleja y deja mi corazón helado,
es cuando se duerme mis versos.
Ella es otro mundo, es el reverso
de esta vida que tanto he anhelado.
Penetra en los cristales de mis ojos,
dentro de mí: ¿qué camino escojo?
Para ella quiero una vida estentórea,
pasearla sobre alas de mariposa,
y acostumbrarme a su esposa.
Ella es ave real que me pecorea.
Autor: Alcibíades Noceda Medina