Inalcanzable...

En el agua, cristales o en un espejo
encontraste tu belleza inabordable
murió Narciso en tu lecho inagotable
donde abordarte tan solo es un reflejo.
Mi corazón se oprime y más se agita
cuando tu cuerpo tan pleno de tersura
oscila del rubor a la blancura
que irreverente a la pureza imita.
Porque Dios me dio el deseo y el empeño
y me negó llegar a tu seno que palpita
con rostros que para mi solo es un sueño.
Que trampa del destino tan bien planeada
hizo que tus perfectas formas, tuvieran dueño
en otro ser por quien jamás serás amada