Acallando los gritos de mi alma,
Me pregunto, porque llorar por ti?,
Si tu no estas muerto,
Tú vives en mí,
Tan cierto como el aire,
Tan real como la lluvia,
Tan presente como el sol en las mañanas,
Sofocando suspiros,
Le pregunto a mi corazón,
Porque no fuiste mió?,
Y de pronto me doy cuenta,
Que nadie pertenece nadie,
Pero cada cual le pertenece a si mismo,
Con el rostro bañado en llanto,
Alzo la mirada al cielo,
Y le pregunto a Dios,
Porque te amo tanto?
Porque no puedo sacarte de mi corazón?,
Y Dios me responde con voz dulce y suave…
Que si me amaste, pero no de la manera,
Que lo desee,
Me amaste como Dios nos enseño,
Como tu prójimo, como tú amiga,
Más yo me empeñe en obtener el amor que tu no podías darme, Y por eso eché todo a perder,
Espero no me guardes rencor por haber pretendido mas de lo que tu,
Pretendías,
Pero tu manera de ser tan divina, me hizo cada día mas amarte,
Como a mi propia vida,
CM.
Este no es un poema ni una poesía, pero es un escrito, que salio de mi alma, para el hombre que mas he amado en la vida.