Cual águila altanera vas levantando el vuelo,
orgulloso y triunfante te elevas con el viento
de la fragil caricia de otro cielo.
Y yo en vacuo sentir, volar no intento...
Triste, sin alas, deslizarme siento
en nebuloso pièlago perdido.
Y me adentro en las nubes del silencio,
mientras rumian los vientos del olvido...
Y desde aquí te observo, con tu orgullo,
cual águila silente y ostentosa,
con esa gracia altiva y venturosa...
Y este corazón, que aún siendo tuyo
se vá olvidando acaso de sí mismo,
perdièndose en el filo de tu abismo...
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!