discúlpame por haberme enamorado de ti,
y porque algunas veces te habré soñado,
y por los versos, que pensando en ti escribí,
y que al final no fueron correspondidos.
Discúlpame porque a veces,
sonreí y después entre sollozos me dormí.
Por imaginarte en todas las poesías,
por soñar despierto, por pensar en ti.
discúlpame porque a veces mis labios,
se abrieron sin querer y pronunciar tu nombre.
Por pensar a veces en quererte ver.
Pero se va yendo mi alma escondida,
entre el ocaso sollozando por tu amor.
Perdón por amarte en silencio,
perdón por soñarte otra vez.