Mirando el mar (Ovillejos a mi madre)

No dudó nunca al llegar,
en dar
con cariño y con dulzura
ternura,
sin faltar nunca calor
y amor.
.
Siempre, siempre alrededor,
como una agradable brisa,
no dudó con su sonrisa
en dar ternura y amor.
.
“Alba” de penas inundo
mi mundo,
cuando el recuerdo decide
te pide
lo que se añora en exceso,
un beso.
.
Duro este adiós sin regreso
abrazándose al pasado;
cuando el silencio es pesado
mi mundo te pide un beso.
.
El reir sin estar triste
no existe,
ni una mirara oportuna,
ninguna
parece sin ti especial
igual.
.
Aunque llegado el final
mucho se queda en la almohada.
Como una madre no hay nada,
no existe ninguna igual.

.
Ramón Bonachí