En aquel rudo escollo,
en el cual no pude pensar,
si la vida tiene otro nombre,
que no sea la soledad.
Porque oscuro se torna el hombre,
dentro de lo que se llama amar,
creyendo que son unas cadenas
de las cuales no podrás escapar.
Pues yo construyo mi mundo,
fuera de la soledad,
y busco en mis amigos,
la dicha y la felicidad.
Pues me he encontrado sin rumbo,
solo y sin poder salvar,
aquellas penas que sufro,
y que sufrí en soledad.
Pero todo llega hasta un limite,
y todo tiene un buen final,
todo aquello por lo que luchas,
tienen un punto y final.