Te saqué de mi alma.

Cómo me dolió tu engaño lloré para no llorar jamás porqué de mis ojos ya lágrimas no saldrán. Cómo sufrí al enterarme qué no me decias la verdad nunca supe quién realmente erás, solo supe qué mi corazón latía por tu presencia y tu espera. Cómo me ha dolido ese puñal qué cruelmente clavaste en mi corazón, te hubiera querido mucho te hubiera dado todo mi amor pero me mentiste ¡qué cruel es la vida, cómo duele una traición!. ¡Qué bella es la verdad! tan lindo oirte expresar, me enamoré de tus bellas palabras y de lo bién qué me tratabas, me conocías íntimamente y yo de tí casi no sabia nada, pero al enterarme qué tú me engañabas cerré mi ojos y de un jalón te saqué del alma.