Cielo, mar, tú

¿has visto al cielo confundirse con el mar?
¿has oído el trino de los pájaros al salir el sol?
Yo sí, y ha ocurrido algo:
hace tiempo no veo ni oigo nada, veo algo mejor,
veo tu sonreír y oigo tus palabras.
El mar no se junta con el cielo,
hay algo entre ellos que jamás antes ví
y ahora que te veo se que siempre estas ahí.
Eres eso que divide la mañana del dormir,
la vida de la muerte y, ¿sabes una cosa?
tú eres mi porvenir.
Esta noche quiero que salgas a la calle,
que alces tu mirada al cielo y puedas sonreír,
verás todo un desfileblanco diferente al de ayer,
será todo un desfile apartado para tí
y habrá un ligero aroma parecido al de la miel,
será el aroma de mi alma,
serás mi razón de ser.
Las estrellas se unirán con fuerza
e ingenuas tratarán brillar,
harán del cielo un espejo para poderte admirar,
asi desde mi cama alzaré mi vista al cielo,
me acomodaré bien en la almohada
y dejaré de respirar.
Evocaré sólo tu imagen y al fin podré dormir,
quisiera que esto fuera equivalente a mi voz
pero así podrás leer esto y darle entonación,
entonces tú podras voltear a mi sufrir
y si esto no te basta...¿entonces qué hago yo?
¿Qué hago con mi vida?
¿Qué de ella estoy haciendo?
es una mezcla de ilusiones
que se tejen en el cielo.
El cielo y el mar ya no se juntan,
mejor, pues daba miedo,
era ver un sólo abismo y ahora que te veo,
te veo en el centro y eres todo el mundo.
te amo y bien lo sabes, con loco desvarío
y qué hare si a esto se lo lleva el río...
haré en lo alto de mi mente un altar para velarte,
velaré tu sueño hasta la muerte y después,
en vez del cielo o el infierno
preferiré, para siempre,
perderme para amarte.