Hoy se pierde una mujer en la tierra
y gana un ángel el cielo,
las hijas quedan desconsoladas
pero un mundo para ella se ha abierto,
ya no más dolor en la piel,
ya no más sufrimiento.
Murió como pasó por la vida,
una vida en silencio
donde su voz dulce la precedía
ante quienes la conocieron.
Dulzura, cariño, ternura,
dones que en ella nunca murieron.
Ahora en su lecho de descanso,
con esa cara de sueño eterno,
manos entrelazadas, ojos cerrados,
pero corazón muy abierto
su alma ha dejado en esa piel
el reflejo de una sonrisa en su rostro sereno.
Su cuerpo es enterrado,
y como semilla va a la tierra,
porque no dejará este mundo
sin que su carisma sea un emblema,
ansias de vivir porque mi tía no ha muerto,
su descanso hará brotar floradas bellas.
En silencio nos dejas,
como en silencio pasaste tu vida,
y ese silencio ha transmitido
el sonido de una música sentida,
donde el compás de tu voz canta.
el morir es volver a la vida.
Adiós tía Sagrario,
desde tu espacio vela por todos,
haznos llegar esa serenidad
que mana de tu rostro,
tu muerte fue dulce y nos indica
que no te vas, siempre estarás con nosotros.
hermoso , no sabes, moviste en mi un sentimiento , la perdida siempre es dolorosa , me encantó tu poesia , momentos dificiles en la vida pasamos , pero Dios es nuestra fortaleza ...hace tiempo ya de tu poema , sin embargo sigues moviendo corazones ...en hora buena ... tus letras me llegaron al corazón.