En la auricula diestra de un corazon siniestro

En la aurícula diestra
De un corazón siniestro
Marcos Siemprevivo
(El inmortal)
Atesora ilusiones
Para no morirse en vida.
Calcula sin oprobios,
Ahorra esperanzas,
Se corta un poco las alas
Porque sus gobierno
No le permite volar tan alto.
Le duermen el sueño
Y le despiertan broncas.
A veces se lo ve arrastrarse
En el barro húmedo
Entre escombros de basura
Y sueños.
Sueños de amores sinsabores
Que no figuran en la internet.
Pero otras veces se reúne
En la esquina de lo imposible
Para reclamarle a dios
Su temprana desaparición.
Ya no se ata los cordones
Porque las madreselvas de la injusticias
Se le empezaron a enredar en los pies.
No cree en el perdón
Porque no cree en el pecado.
(Ambigua teoría del corazón sufrido)
Por eso nunca acude al sacerdote del pueblo
Y menos (mal) al juez de turno.
Sólo esas ilusiones
Lo hacen estar vivo.
Aunque a veces la muerte
Le viene a golpear la puerta
En la aurícula diestra
De su corazón siniestro
Y él la atiende con mala cara
Harto de que el gobierno
Le imponga impuestos al arte.
Sergio Damián Vidal