Probando la noche

Trabajó el tiempo, llevo mi rostro
dibujado por él. En este ligero
tiempo hubo dulce lecho con esmero.
Esta noche renovaré y seré otro.
Aún soy victorioso hasta la cima.
Camino la madrugada, esta lleno
de pechos exuberantes, casi obsceno.
A la primera mis años tiro encima.
Tan lleno de vida regalan sonrisas,
sus mulos desnudos, es el camino.
Con haces diestro llegue a destino.
Campo de rosas florecen de prisas.
en una trémula boca mi mejilla
descansa. Vientre para amar brilla. Autor: Alcibíades Noceda Medina