Fuiste la ilusión a mis vivencias,
el despertar cada mañana
y ver tu cara de princesa,
fuiste el regocijo a mi corazón.
Creciste entre brazos y besos
cual joya mas preciada,
mi orgullo y mi sueño.
mi hija…
Ahora, tus alas formadas
quieren recorrer los cielos,
cruzando cerros y tierras
lejanas.
Tus ilusiones crecieron
con los años y la vida…
generosa amiga, te dio
la bienvenida.
A la suerte retaste y media
vuelta te diste,
no escuchaste consejos
y un día… solo te fuiste.
Lloro la tristeza,
triunfo la melancolía,
se fue siguiendo el amor
que ella creia.