Te pido un segundo inconcluso, que no termine el tiempo para nada, una parte, te pido, de tu impulso un renglón del libro que mirabas. Te pido la calma de una noche, el verdor del prado en verano, un beso, te pido, y un derroche que surquen los senderos de mis manos. Te pido varias impresiones, un lugar infinito para amarte, tu espalda, te pido, y sensaciones que se queden cuando tengas que dejarme. Te pido un lugar para enamorados pequeño, que realze tu impostura esa caricia, te pido, que he dejado olvidada en mi cuarto, de locura.