Me vuelves a ilusionar,
llegas,
como un árbol de cielo,
nacido en el mes de marzo,
y vuelvo a sentir la vida,
la luz de tu reflejo,
de tu sonrisa,
y me vuelves a ilusionar,
impregnándome de música,
de vida,
sintiendo tu rio,
que estremece mi aire,
aspirando tu arboleda,
tus sueños de estrella,
tus cuentos de infancia,
llenos de magia,
y me vuelves a ilusionar,
dándome la mano,
con la dulce suavidad,
de tus caricias de mirada,
sacándome de algún lugar,
extraño, gris,
donde me habia perdido,
en ese túnel extraño,
donde no existe,
tu dulzura de primavera.
Me vuelves a ilusionar,
y renazco de nuevo,
en tu jardin de poesia,
atraido por el magnetismo de tu corazón,
por tu marea silenciosa,
que surge de tus labios,
como mar que ondula,
que provoca,
las más bellas olas de amor.