Te amo, grandemente,
estás siempre cerca de mí,
cuando clamo a tu puerta,
Con ferviente fe, me contestas.
Mi vida es testimonio de bendiciones,
De tu manifestación divina,
cuando llega la necesidad,
allí estás, llenando de amor con tu presencia.
Gloria a ti Señor, por tu misericordia.
He clamado a ti, tantas veces,
sintiendo que no puedo más,
En ese momento, llegas, mostrando tu piedad,
He visto tu amor, en cada segundo de mi vida,
Gloria a ti Señor por tanto amor,
Sustentando mi alma con tu justicia,
Trayéndome la calma, cada despertar.
Es justicia divina, cada amanecer,
Después del pacto de Jesús,
Al que te ama bendices,
Al que está lejos de ti, le proteges.
Eres justicia divina para el desamparado
garantizas el pan, a todo ser humano,
porque tu Jehová, eres amor
Transparente, omnipotente y cálido.
Gloria a ti Jehová, por tus bendiciones,
Gloria a ti Jesús, porque en ti he confiado,
Encomiendo en ti mi camino,
Exhibiendo tú justicia como la luz,
Mostrando con fuerza tu rectitud.
Te amo, Jehová, en ti confío Jesús.