Iba caminando por la calle
Mirando al suelo,
Contando baldosas, esquivando heces.
Los coches vomitaban humo e insultos,
Por el culo, por la boca.
Las melodías polifónicas,
Los neumáticos tatuando el asfalto,
Los sutiles empujones,
Pisotones y mal de ojo que me regalan las personas.
Las sonrisas rodando por la boca del metro,
Y el humor en el subsuelo, agrio y enfermo.
Las colillas me decoran el paisaje,
El olor de alcantarilla, mi perfume, mi brebaje.
Me juzga el ojo de cristal de traje gris,
Mientras espero una obra de caridad.
¿Alguien quiso salir a jugar?
Dicen que ya no tienen edad…
Todos los días parecen iguales aquí.
Una letra…un seguro… los dientes del niño…
Un coche… otra letra…. Un desvarío…
Y es como una mala canción, como un susto… un ¡no me lo creo!
Y cuando el otoño ha llamado cincuenta veces a tu puerta,
As visto que tu futuro, ahora es pasado.
Que el espejo…Te miente… que solo es un chiste.
El hueco del sofá,
El amor ¿Dónde esta?
Las calles siguen igual…
El progreso es un fraude, el mañana un desastre…
De primero, una bofetá.
Un gran amasijo material.
Cien mil maldades y… ¿Qué dirán?
Creo que comprendí por que te haces viejo…
No es lo mismo para mí, son dos conceptos…
Cuando dejas de soñar…
Cuando dejas de jugar…
Cuando dejas de amar…
Cuando dejas de bailar…
Cuando dejas de saludar a los demás.
Cuando ya ni llamas, ni por navidad.
Dime que se siente…
¡CUANDO MUERTO EN VIDA TÚ ESTÁS!