Solo Adios...

Cuando no tenga la caricia de tus manos
cuando las sombras invadan esta casa
como soportaré este castigo que inhumano,
llega como temporal que impiadoso arrasa
Dios en su magistral alquimia indescifrable
solo en un instante me da y luego me quita,
aunque se que mi amor jamás fue condenable,
merecedor de este dolor que a la muerte cita.
No fue mío el trágico desatino de no ver
ni comprender la gloria que antes tenía
porque supe valorar, cuidar y entender
sin necesidad de perder, la conquista mía.
Ahora no soy yo quien llena los momentos
que preceden tu viaje, la distancia y la partida
pero estoy seguro que al pasar el tiempo,
verás que solo tuya era la pobre vida mía.
Adiós, solo adiós y soñando tu regreso
no tendré lágrimas ni exhalaré reproches
como marmórea estatua permaneceré tieso
en mi sentir, durante tu elegida noche