En el rincón de mi memoria

En el rincón de mi memoria, reposa un recuerdo,
como una suave brisa que acaricia mi ser,
es un tesoro guardado en el baúl del tiempo,
un fragmento del pasado que nunca dejaré perder.

Es un lienzo lleno de colores y emociones,
donde los suspiros y risas encuentran su lugar,
un viaje a través de la nostalgia y las pasiones,
un instante suspendido en el espacio temporal.

En ese recuerdo, veo el sol brillando radiante,
iluminando los rostros con su cálido abrazo,
siento la brisa acariciando mi piel constante,
y el aroma de flores que envuelve el regazo.

Hay risas flotando en el aire, como notas musicales,
alegría compartida en complicidad y amor,
miradas cómplices que hablan en susurros leales,
tejiendo recuerdos que trascienden al dolor.

Las palabras, como aves libres, vuelan en el recuerdo,
conversaciones llenas de significado y verdad,
cada frase impregnada de afecto y acuerdo,
enlazando corazones en una eternidad.

A veces el recuerdo es melancólico y nostálgico,
una herida abierta que aún no ha sanado del todo,
pero también es un faro que guía en lo idílico,
un tesoro de vivencias, donde el amor se acomoda.

En el rincón de mi memoria, ese recuerdo vive,
atemporal y eterno, como un suspiro en el viento,
y aunque el tiempo avance y la vida se deriva,
ese recuerdo permanecerá siempre en mi pensamiento.