LA DULCE CANCION DE AMOR DEL GRILLO

Mi silueta se dibuja en la atmosfera de la noche,
llamándote y en dulces suspiros diciendo,
tu nombre a la suave brisa de la madrugada.
Cuando dejándome exhausta, húmeda y
sudorosa cuando te hice entrega de mi cuerpo,
mi amor y todos mis placeres y
tú me decías muy bajito al oído ahora amor,
te siento mas mía que nunca porque,
anoche te poseía en mis brazos y te amaba.
Durante la suave brisa de la brillante noche,
donde la luz de la Luna entra por la ventana y
deseo tus dulces besos candentes de tus labios,
que yo sueño con la bonita risa de tu boca,
en la fuerza de tu alma siento tu amor,
con un bello y delicioso corazón inquieto,
qué extraña la miel de tus besos,
por pensar en hallar una bella flor como tú.
En las noches que te asomas a la ventana y
la Luna brilla más en el firmamento,
le tengo celos al alba, porque tu cara en,
la ventana reluces como una estrella y
los luceros cuando más brillan te llaman,
tengo celos mi amor hasta de la brisa que, por las noches acaricia suavemente tu rostro.
Tú me decías al oído si quieres conocer, los aromas más dulces de nuestros cuerpos, que emanan por el deseo y la excitación y
quieres ver el agua de mi manantial emanar y
verla como corre libremente por su rivera u
oír el canto del grillo en las noches de Luna nueva,
que suena como una bella canción de amor y
necesitas beber los más dulces néctares,
que corren libres por mi manantial de amor o
el agua tibia y viva de donde brota el amor puro,
donde nacen las más bellas y fecundas,
pero aromáticas flores como las de azahar y
del más sincero, puro y bello amor.