A los que ya se han ido.

1
No llores, ten por cierto,
Que aunque muerto parezca,
Estas llorando a un muerto que no ha muerto,
Pues aunque ya no viva en esta Tierra,
Vivo sigue en Los Cielos.
No llores, ten por cierto,
Lo que desde La Biblia
Dios nos sigue diciendo:
“A los ojos del necio
Pareció que moría.”.
¡Pero vivo seguía
Al que daban por muerto!
Exulta de Alegría
Y entona estas Palabras,
En medio de tu Llanto y de tu Duelo:
Son un Canto a la Vida
Y en ellas puso Dios nuestro Consuelo.
No llores, ten por cierto,
Que el cadáver que velas son los restos
De un Cuerpo que aquí queda
Y que, como era polvo,
Se lo tragó la tierra
Mientras su Alma ascendía.y ascendía
Hasta alcanzar El Cielo.
No llores, ten por cierto,
Que aunque tu Llanto sea tan humano,
A tu Fe contradice
Que estés llorando a un Muerto que no ha muerto,
Que ya en Los Cielos vive,
Que cara a cara a Dios ya le está viendo
Y en viendo a Dios, a todos,
En Dios nos sigue viendo.
No llores, ten por cierto,
Que a la Llamada de Su Amor, un día,
Dios nos juntará a todos
En Su Casa del Cielo
Y de Su Paz gozando eternamente,
Eternos nos haremos. 2
Los que se han ido,
Conmigo se han quedado,
Pues que no les olvido.
Los que se han ido,
Con ellos me han llevado:
Ya no soy el que he sido.
Ellos son los que han muerto,
Pero yo ya no vivo,
Pues mi Vida eran Ellos.
Quedé a solas conmigo.
Cuando se fueron.
Los que se han ido,
Ya han subido a Los cielos.
Y yo aquí sigo.
¿Cuándo, cuándo, Dios Mío,
Me llevarás con Ellos?
Ellos ya están Contigo.
Y aquí a mí me dejaste.
Sin Ti y sin Ellos.
Mi Amor se volvió Llanto
Cuando se fueron.
¿Cuándo se volverá
Gozo en Los Cielos? 3
Señor, te la llevaste.
¡Y qué solo y qué triste
Que me dejaste!
Ya mi Pena es tan grande,
Que es imposible
Que se me agrande.
Ya mi Pena es tan grande
Que me desborda el Alma
Y se me sale,
Como el Agua que salta
Todos sus cauces.
Señor, mata esta Pena,
Antes de que me mate.
Si no la matas,
Señor, Tú sabes,
Que moriré de Pena,
Recordándola. 4
¡Qué pronto te ha llevado
La Muerte al Cielo!
¡Qué pronto me has dejado
En esta Tierra, dura como el suelo
Que te ha tragado!
¡Qué sin Cosuelo quedo!
¡Qué Abandonado!.
Al Cielo, donde has ido
Yo te quiero seguir.
Ya nada en este Mundo me retiene
Al no tenerte a ti.
Si fuiste tú mi Vida,
¿Cómo vivir podría,
Vida Mía, sin ti?
Llévame ya, Amor Mío, a dónde vivas.
Llévame ya, Amor Mío, a donde estés,
Que para irme contigo,
Yo ya me estoy muriendo
Un poco cada día,
Y muy pronto, del todo,
Me moriré. 5
De tanto amarte a ti,
También amé a la Vida,
Porque todo en la Vida
Lo eras Tú para mí.
Dios con El te ha llevado y, al llevarte,
Contigo se ha llevado
La Ilusión que tenía por vivir
Para más Vida con mi vida darte. 6
Desde que ya no puedo
Decirte que te quiero,
A cuantos se me acercan
A consolarme
Voy diciendo: no quiero.
Voy diciendo: dejadme.
Voy diciendo: me muero.
Desde que te me has muerto,
Contigo he muerto yo.
Todos quieren venir a consolarme
Y a todos voy diciendo
Que no., que., que no.
Que ya no podrá nadie consolarme,
Salvo en Los Cielos, cuando muera, Dios,
Y con Ella y ante El vuelva encontrarme. 7
Si para Ella he vivido.
Señor, y te la llevas,
Devuélvele a mi Vida su sentido
Y llévame también a mí con Ella.
Si para Ella sólo Yo he vivido,
¿Qué hago ya en esta Vida
Después que se me ha ido?