NUESTRO ROL EN LA VIDA

Muerte, belleza,

dramático todo aquello que late,

pues qué mayor drama que la

vida en sí misma.

Actuación, el escenario,

los miedos, y el rol,

el papel que nunca fue

de nuestro agrado,

pues siempre quisimos ser

los divos sin esforzarnos

y acabamos siendo teloneros,

personajes terciarios,

sin verdadero protagonismo.

La vida es la representación

de nuestra alma,

y hay telones que se bajan de

improviso aún circuncidando

obras de arte inmanente

La vida es un jeroglífico enigma,

y el guión que la mano azarosa nos otorga

no es siempre el más agradecido.

Única manera de cambiar las tornas:

aprender cuál es el rol que

queremos representar o liderar,

y, a pesar de todo,

a pesar de todos,

salir al exterior, al mundo examinador,

al público que nunca es el más entendido

en las causa del corazón,

y arrojarle nuestra propia e íntima personalidad.

Si nos dejamos la piel,

si les ofrecemos nuestra integridad,

(esa peculiar sustancia de las que estamos hechos),

y nuestros instintos siempre fueron de bondad,

entonces, yo afirmo, nadie es merecedor

de ser reprochado con una crítica destructiva.

Pon todo tu empeño y nunca tengas miedo,

la sociedad es dura pero a nadie se come,

(el único que se comerá a sí mismo eres tú).

Un lema debe grabarse a fuego en tu mente:

 Si tú no confías en ti mismo,

¿quién supones habrá de confiar en ti?