Poeta y poesia

Quien tuviese el preclaro y exacto

verbo de todo buen poéta.

Tornado la palabra en vuelo eficaz

de una certera saéta.

Atinando las dianas, esgrimiendo

tán solo una cuarteta.

Eligiendo a tiempo y sin alardes

la rima cuasi perfecta.

Rescatando del olvido los amores

aún desencontrados.

Soñando por otros, los sueños que

aún no fueron soñados.

Liberando como pájaros en el aire

los anhelos postergados.

Atesorando las caricias y besos

que nunca fueron dados.

Uniendo con eslabones de esperanza

toda dicha y armonía.

Abriendo incontables horizontes pletóricos

de inmensa alegría.

Protegiendo con la franca serenidad de la

eterna sabiduría.

Todos aquellos corazones que sufren en

cada palpitar una agonía.

Trastocando los puños cerrados en manos

mansas y dispuestas.

Derrumbando los oscuros murallones abriendo

de par en par las puertas.

Proveyendo los bálsamos que cierran las heridas,

aun las mas abiertas.

De tanto en tanto se da el milagro y finalmente,

 lo encuentras.